Open Source, Laboral

Hola, soy linuxero, soy defensor del open source y soy un hipócrita.

Todo empezó en la universidad, allí descubrí linux y desde entonces, cuando voy por la calle la gente dice que soy un friqui, que soy un experto informático.

Trabajo en una importante factoría de software, dedico el día y el 66% de mi vida a generar líneas de código. Me encanta entrar en los foros y poner de vuelta y media a todos los que hablan del Sistema Operativo Windows y niego ser un troll, porque soy defensor del open source y depositario de la moral absoluta, única y verdadera.

Efectivamente, programo en .NET y si pudiera, sería un M$ MVP para acceder a un trabajo mejor, pero de vez en cuando digo que programo en mono y todo queda perdonado, porque claro, no hay alternativa y todos saben como funciona éste mundo.

Suelo mirar con condescendencia a esos usuarios frustrados de windows que cada dos por tres tienen que formatear, reiniciar etc etc, y proclamo las virtudes de gnu cada vez que puedo, efectivamente tengo un ordenador con arranque dual y además en mi ubuntu hay instalado un wine, para los malditos juegos comerciales que tanto me gustan.

Los juegos de linux no me parecen aburridos, pero claro, prefiero pagar porque el último need for speed es una pasada y además me he dejado una pasta en un equipo nuevo para poder usarlo y como no, he despotricado todo lo que he sabido y más sobre las malditas licencias del windows preinstalado.

En fin, soy linuxero, soy defensor del open source y soy hipocrita. La vida es una doble y controvertida hipocresía, mezcla de falsedad y oportunismo, como los insectos.

El Open Source, Social

De todos es sabido que lo que les gusta a las grandes empresas es ganar dinero. És su tarea, su cometido, hasta ahí podemos estar de acuerdo o no.

Podemos discutir sobre el impacto social de una empresa en una comunidad, de lo positivo y lo negativo, pero todos coincidiremos que a la mayoría de empresas, su impacto social le es indifirente, o lo que viene a ser lo mismo, le da igual.

Cuando una empresa deja de ser rentable en una comunidad, ésta se marcha a otra. ¿Necesitamos Empresas?

En África nunca había habido paro hasta que llegó el hobre blanco y sus empresas. Ésto era así porque las personas que compartían una misma comunidad se repartían las tareas entre sí y todos tenáin algo en qué trabajar.

No había competencia, todos generaban riqueza y la riqueza era de todos. Tuvimos que llegar nosotros para que éso cambiara, imponer nuestro sistema de gobierno, nuestro sistema político y por supuesto, con la excusa del desarrollo, nuestras empresas.

Nuestro modelo socioeconómico impone una competencia natural para con otros seres humanos, potenciando el individualismo y el proteccionismo. De ahí nacen nuestros verdaderos verdugos. El hecho de que alguien sienta miedo de perder su trabajo (su dinero y otros bienes) le obliga a protegerse (americano total) y a crear barreras legales para protegerse (Leyes de patentes, leyes de comercio, etc etc)

Los humanos que, tan ciegamente se aferran a ése montón de papeles que creen que los protegen no son capaces de ver la realidad, es decir; que esa montaña de papeles no es más que una montaña de papeles, que no solo no le protegen de nada, si no que lo obligan a ceñirse a un comportamiento autodestructivo que acaba devorándole (luego explico ésto) e imponiéndole una montaña de obligaciones morales que no ha podido decidir y sobre la cual no tiene ninguna influencia. Su pasión; voluntariamente aceptada; y da gracias de ello.

Cada vez que oigo a alguien hablando sobre la protección del conocimiento, leyes antifraude, beneficios sociales de las empresa, globalización, desarrollo o algo del estilo me dan náuseas.

Ésta vorágine autodestructiva (llamada desarrollo, globalización o cualquier otro sinónimo que se te ocurra) acabará derrochando todos los recursos de nuestro planeta, acabará trasladando a la sociedad problemas que no tenía (guerras, hambrunas y sequías) sólo para que unos pocos sigan llevando su ritmo de vida...

No podemos hacer nada ¿no? No estoy de acuerdo. Creo que la solución es muy sencilla: No hay que tener miedo al futuro, menos aún al cambio.

Una sociedad sin miedo sería capaz de aceptar cualquier futuro, dijeran lo que dijeran sus gobernantes.

Open Source y Lavadoras

Ésta reflexión me sobrevino un día cualquiera de ésos que, llegas a casa y resulta que la caldera ha dejado de funcionar y claro, hace un frío de pelotas.

Cogí mi antigua maleta de electricista (me permití el lujo de caer en el recuerdo de un tiempo aparentemente mejor, imágen que se desvaneció de inmediato al recordar las averías que suelen aparecer en las granjas de cerdos, los compañeros de rama saben...) y me dispuse a desmontar la caldera.

Se trata de una caldera roca 20/20T, nueva. Éstas calderas tienen una avería muy común, ocurre que los termistores de Agua sanitaria y Agua de radiador tienden a desgastarse con demasiada frecuencia, dando siempre códigos de error distintos (50-60-90 creo) así que fui al grano y presioné el botón rojo de reseteo. Con eso y un par de martillazos en el tubo, la caldera estuvo en funcionamiento de nuevo, por lo menos hasta que pueda restituir los termistores, funcionará -pensé yo-

El caso es que ésa misma tarde encendí mi portatil e intenté instalar el escritorio movistar sobre windows vista. Craso error, los drivers no son compatibles con vista, con lo que la targeta pcmcia movistar se convirtió en un ladrillo sobre mis manos.

Eché de menos la capacidad de coger mi caja de herramientas y echar un vistazo de por qué demonios no funcionaba el escritorio movistar de los huevos.

¿A quién se supone que debo culpar? Mis dos softwares son perfectamente legales y además me han costado una pasta. No sólo no pude elegir el portatil que me gustaba con Windows XP sino que encima nadie me ha garantizado la compatibilidad con mis softwares anteriores, legales.

Cuando mi madre compró la lavadora, le dieron una garantía ¿que hubiera pasado el programador de la lavadora nueva no hubiera sido compatible con la ropa vieja y el jabón??

Demonios, que lo hubiera desmontado y puesto otro que ya tenía y funcionaba perfectamente. Yo pagué el viejo, era mío, es mío y puedo desmontarlo y modificarlo como yo quiera, y adaptarlo a mi lavadora nueva si me apetece o lo necesito.

Imagínate que un día tu lavadora se estropease y cuando fueses a quitar la tapa debajo hubiera un mensaje que dijera: "La has pagado pero es nuestra y no puedes modificarla porque nadie nos asegura que no la vas a revender o hacer otra igual" ¿Qué haría yo? Pues decentemente metersela por el culo al que me la vendió y decirle: "si tú no puedes garantizar que funcione, no tienes derecho a venderla, porque éso se llama estafar"

Pero supongo que hacer eso con un sistema operativo es bastante más complejo, bueno, sistema operativo o Norton Antivirus o cuaquier software privado.

Me imagino que si me presentase en las oficinas de Microsoft con mi etiqueta de windows vista (la que hay en la base del portátil) a reclamar el dinero que me costó argumentando que pese a que mi equipo es nuevo, pese que ya vino instalado no funciona, me tratarían de loco o de ignorante y sus gorilas harían de mi una masa amorfa de carne ensangrentada.

También podría ir a las oficinas del fabricante (lo que quedase de mi) con la etiqueta de la licencia de windows a pedirles la compensación porque ése sistema nunca funcionó, aunque creo que ésta vez no vendrían sus gorilas, creo que llamarían a los de redmond para que acabasen con lo que quede de mí.

Fundamentalmente, estoy reivindicando mi derecho a probar un producto y devolverlo porque no cumple mis espectativas, en forma y plazo.

Si te instalasen una lavadora y su consumo energético fuese mucho mayor del que esperabas, tanto que no puedieras lavar y concinar al mismo tiempo, y quisieras devolverlo, con la factura sería suficiente.

¿Qué demonios le pasa a la gente? ¿Qué rayos ha pasado con nuestra inteligencia?

Mi Primera Entrada

No Tengo costumbre de escribir blogs. Quería que ésta fuese mi primera frase, para que quien me lea no se sienta extraño leyendo palabras que bien podría haber oído, me refiero a mi dialéctica, puede resultar chocante.

He estado reflexionando sobre si debía o no abrir un blog, la verdad la idea de expresar mis opiniones en un ambiente público no me atrae, pero estoy cansado de estar en silencio y ver cada día lo mismo...

Una incesante sucesión de bombardeos mediáticos que se cierne sobre nosotros con la estúpida justificación del morbo y lo ajeno, la verdad, ya basta.

Para quien no me siga (ya he dicho que escribiendo puedo ser un poco extraño) voy a poner un ejemplo práctico, una manaña en Saint Gaudens, a las 7:55 am.

Me despierta mi radiodespertador con ése unísono pitido ronco, hasta que no soy capaz de soportarlo más, una ducha y a tomar un café. Enciendo la tele, primero T5, luego A3, si en una ponen el sórdido resumen de la jornada anterior (No llegaré a entender por qué a la gente le gusta tanto) en la otra estarán sacando a varios sudafricanos apaleando hasta la muerte a otro, en un lejano país al borde de la guerra civil, o lo que es lo mismo, apago la tele con el estómago medio revuelto, cojo los trastos y me dispongo a coger el coche para ir a trabajar.

Cinturón, giro de llave, radio. El programa de Anda ya. Se trata de una tribu de gritones adultos con ideas pseudo-infantiles que se dedican ha hacer verdaderas putadas telefónicas, a hacer sufrir a gente para aumentar su cuota de morbo diaria (me dan asco). Evidentemente no están poniendo música, así que como la COPE es inaudible, presiono el botón 5 (la ser). Noticias. Son las 8:00 y llevo casi 20 minutos conduciendo, escucho noticias y las enseñanzas morales de un locutor de radio que dice que es un periodista imparcial, pero no para de hacer comentarios marcadamente políticos (¿imparcial no significa que lees la noticia y punto, sin dar interpretaciones?!!!) Entonces es cuando me pongo mi música favorita y me abstraigo diez minutos antes de entrar a trabajar...

Si nos detenemos a contar a la cantidad de gente (estúpida) que llegamos a escuchar al día, mejor no, tan sólo una hora antes de entrar a trabajar, nos daremos cuenta de una terrible realidad: EN ESPAÑA SE VIVE DEL MORBO Y DE LO AJENO.