Y es que no aprendemos...

Éste es un bonito discurso. Atentos, parece anticuado, pero creo que está de bastante actualidad.

4 comentarios:

Ruben dijo...

Este ya me lo conocía, es cojonudo también este discurso.
Cada vez me gustan más tus entradas!

Anónimo dijo...

Hola Daniel:

Estoy leyendo tu blog, y sin perder de vista que no son malas entradas, sí que veo una progresión en ellas que no me gusta.

Estas yendo de lo auténtico a lo heredado. Incluso parece, o se atisba, que vas de la opinión propia a la ajena.

La duda humilde que le queda a este servidor es, si la opinión ajena de la que te apropias es, opinión sobre la que coincides de forma libre o es opinión sobre la que coincides en base al hastío y el derrotismo.

Aquí dejo mi reflexión, espero te aporte más que unos simples comentarios de coincidencia.

Un placer leerte,

Juan Luis Ordóñez.

Ruben dijo...

Juan Luis Ordoñez, no sé quién eres (creo), pero por alusiones, tan importantes son los comentarios de crítica, que también he hecho en otras entradas, como los de apoyo y coincidencia de ideas. Probablemente incluso estos últimos lo sean más.
Y en cuanto a la crítica que le haces (con tanto formalismo…), a mi parecer, sigue siendo igual de auténtico. Estas últimas entradas no son incompatibles con el resto, aunque, eso sí, tal vez muestren una cara suya más profunda, menos pragmática, más reflexiva-ideológica, muy necesaria a mi parecer.

Unknown dijo...

Hola Juan Luis

La verdad es que no tengo tanto tiempo como antes para preparar mis entradas.

Tienes razón, ha habido cierta evolución en mis opiniones, y es que el entorno me afecta, es lo que tiene ser humano.

Coincido de base con el trasfondo ideológico de éstas entradas, de forma libre y auténtica y de poder echar unas cañas juntos no te cabría duda.

Un placer